Como encontrase con uno mismo? , dónde me busco?.
Por desgracia algunas personas nunca se encuentran. Quizás nunca nadie les enseño como hacerlo.
Hay personas que emplean gran parte de su vida en ayudar a otras personas a encontrarse. Una labor que suele permanecer en la sombra,siendo parte de la esencia de su propia enseñanza,la humildad. El autoconocimiento ,la quietud mental,la meditación o quizás perderse unos días en la montaña. A cada persona le funciona una cosa diferente. Lo importante es encontrarse a si mismo ignorándose a si mismo…lo se ,es un poco complicado de entender y yo no soy quién para explicarlo.
En este caso yo me perdí voluntariamente para así encontrarme y la montaña me ayudó. Tras mi visita a la ciudad de Calafate opté por continuar viajando en bus y cruzar la frontera de Chile buscando la población de Puerto Natales. Mi primer contacto con Chile me pasó totalmente desapercibido,puesto que en esta zona en concreto,al ser poblaciones tan cercanas a Argentina la diferencia de ambiente,población y entorno natural era casi inexistente. Vamos,que era como si no hubiese cambiado de país. Primer quebradero de cabeza…el cambio de moneda. Después de acostumbrarme al cálculo en pesos argentinos todo lo aprendido no me servía ya de nada. Ahora tocaba pesos chilenos. Por lo demás todo sin problema. Un objetivo: La reserva Natural de Torres del Paine. Según las guías de viaje la mas importante reserva natural de sudamérica . Tenia dos opciones muy concretas: a) Excursión organizada de señorito. Un día de visita viendo la reserva desde el bus…todo muy cómodo. b) Enfrentarme en solitario y por tiempo indefinido con las montañas y la naturaleza. … a estas alturas ya imagináis cual escogí,no?
Efectivamente,la maniobra era sencilla. Conseguir una tienda de campaña,un aislante y un mapa de la reserva. Dicho y hecho. En un par de horas tenía todo listo para comenzar la aventura y perderme en las montañas.
A las 10 de la mañana me encontraba accediendo a la reserva. Toda buena expedición requiere de una buena planificación por lo que toda caminata comienza sentándose para estudiar el mapa ,una ruta a seguir y unas metas para cada jornada. El tiempo recomendado para recorrer toda la reserva de Torres del Paine es de 7 a 8 días y en mi caso yo solo disponía de la tienda de campaña por 3 días,por lo que debía sacrificar parte de la reserva.
Con la ruta establecida,bastón de trekking abierto, polainas ajustadas,y chubasquero a mano…mochila al hombro y…primer problema. Exceso de peso !! Como puede ser?,llevo lo justo!!… Tienda de campaña, aislante,saco de alta montaña,cámara de fotos,cámara de vídeo,disco duro,ropa seca,chubasquero,linterna,utensilios de cocina . Quizás mi planificación de víveres para los 3 días había fallado en algún punto. Estaba claro que llevaba lo necesario para mis 3 días pero claro,en un trekking normal no se lleva tanto material de filmación y foto y además los víveres se suelen repartir entre los expedicionarios,pero como ya sabéis esta expedición era en solitario…cara a cara con la montaña. Pocos son los montañeros que cargan con el material de filmación en los documentales con un buen presupuesto (para eso existen o los “burros de carga” o los tan apreciados “Sherpas” o portadores)
Conclusión: un buen trekking se realiza siempre con una buena mochila…casi vacía. Resignado con lo que se me venía encima (nunca mejor dicho),comencé mi ascenso por una de las rutas previstas.
Torres del Paine es uno de esos lugares en los que si te pierdes o un lobo te merienda no se entera ” ni pirri “. Kilómetros y kilómetros de montaña en la que lo primero que te indican en la entrada al parque ,es que no se recomienda ir en solitario,pues una simple torcedura de tobillo se puede convertir en una situación my complicada si nadie pasa por tu misma ruta para echarte una mano. El primer día de montaña completé solo 7 km de recorrido ,pero ojo,subiendo y subiendo y subiendo…Por desgracia el tiempo y las condiciones climáticas en la alta montaña son imprevisibles,por lo que hay que siempre hay que tener algo de suerte para poder disfrutar de las vistas. En mi caso 2 de los 3 días fueron bastante malos por lo que las nubes a mitad de la montaña no me dejaban disfrutar al 100% del maravilloso espectáculo.
El primer día acampé en la zona del refugio “dos Torres” en el que por cierto pasé muchísimo frío,hasta que al día siguiente comprobé que el tipo de la tienda de alquiler de material no me había dado una tienda de alta montaña ,sino una de veranito ,de esas que tienen muchas ranuritas para la ventilación . De toda su familia me estuve acordando el resto de los días pues tenía que dormir con el abrigo,el gorro ,los guantes,tres pares de calcetines,dos pantalones,tres camisetas y por supuesto con la cabeza bien metida en el saco calentándolo con mi respiración a riesgo de colocarme con mi propio “dióxido”…pero fue intenso y disfruté. En ese momento decidí que no le iba a devolver la tienda limpia…ahahah!! venganza!! El segundo día he de reconocer que estaba reventado , y decidí no caminar mas de 4 horas. Pude acampar en la única zona en la que estaba permitido hacer fuego,por lo que pude disfrutar de una buena hoguera solitaria al estilo del viejo oeste.
Hacer un trekking por la montaña es algo mágico,sobretodo cuando lo realizas en solitario. Continuamente volvía a dudar sobre mi capacidad para relacionarme socialmente ,pues reconozco que me cabreaba cuando me cruzaba con otros senderistas que seguían mi misma ruta y perturbaban esos momentos tan intensos que sentía al estar solo y casi perdido en la montaña. Quería la montaña solo para mi!!!, ya sabéis …” mi tesoooro…” (me voy a comprar una montaña).
Beber el agua de los torrentes que bajaban directamente de los glaciares ,pasar horas y horas sin tener ningún contacto con el ser humano, dormir rodeado de todo y nada a la vez… El tercer día fue de nuevo intenso aunque mas adaptado al medio y con menos peso a la espalda ,pues los víveres se iban reduciendo. 17 kilómetros en una jornada fueron mi record en este tercer día,llegando hasta un nuevo campamento base en el que acampé a los pies de una montaña helada y una cascada procedente del deshielo. De película. Pero todo tiene su fin y mi aventura continuaba.
De nuevo vuelvo a cruzar la frontera hacia Argentina llegando al último tramo de mi etapa Argentina; la ciudad de Ushuaia desde la que escribo estas líneas. “El fin del mundo” la llaman,la ciudad mas austral del planeta,pero entre nosotros…es mentira. Hay otra población perteneciente a Chile llamada Puerto Williams que está aun mas al sur. Pero bueno ,suena bonito decir que es la ciudad mas al sur del planeta y a nivel turístico vende que te cagas.
En el momento de escribir estas líneas es domingo día 28 , 00:10 hora española. El martes día 2 a las 22:00 hora española el barco científico ruso “Profesor Molchanov” me llevará a la Antártida cruzando el tan temido por los navegantes “Cabo de Hornos”.
“El continente helado”, el contrapeso para que nuestro planeta se quede en la posición en que está,la tierra en la que tantos exploradores perdieron la vida intentando explorarla. La única región del planeta en la que mediante un tratado internacional sin precedentes en la historia, no existen fronteras pues ,según comparten todos los científicos,es el único lugar en el que según los cambios producidos en el mismo ,el resto del planeta Tierra se ve afectado de forma directa,por lo que dicho continente está exclusivamente reservado para las investigaciones científicas. Durante 10 días disfrutaré de la oportunidad que la vida me ofrece de tener esta experiencia, no exenta de riesgos. Durante este tiempo realizaré una media de 2 buceos diarios bajo icebergs y placas de hielo compaginándolos con expediciones a tierra antártica.
Pronto compartiré con vosotros quizás la aventura mas emocionante de esta vuelta al mundo. Cuando regrese seguro ya no seré la misma persona……ha sido un placer.
” El espíritu del hombre se alimenta de nuevas experiencias”. Cita : Christopher McCandless