En esta ocasión Paco se enfrentó a una aventura en estado puro marchándose a vivir sin nada previamente preparado junto a los últimos Inuits al norte de Groenlandia. El objetivo de esta aventura era bucear en el último poblado habitado más al norte del planeta, Siorapaluk y la región de Thule, así como aprender de los esquimales técnicas de orientación, supervivencia y adaptación al frío
En Siorapaluk tan sólo viven 10 familias y jamás nadie se sumergió antes bajo el hielo en esta región tan al norte, por lo que acompañado por cazadores Inuits Paco recorrió durante semanas con trineos de perros la región de Thule en busca de grietas en el hielo por las que sumergirse a bucear, siendo la primera persona en la historia en explorar estas aguas heladas de la que se tiene constancia. Una aventura que le marcó de manera especial al crear vínculos personales con los habitantes de este lugar