Se trata de la primera aventura de Paco en este país. El Mar Blanco (White Sea) esconde uno de los lugares más bellos de Rusia, desconocido para Paco hasta el momento en que sus compañeros rusos en la expedición Antártica le hablaron de este remoto y gélido lugar rodeado por densos bosques, donde la gran mayoría de sus fondos están aún por explorar
Tras la dificultad de acceder a este remoto lugar, consiguió establecer su campamento en solitario al borde del mar helado y asistido por un equipo de rusos de la zona, abrieron numerosas entradas en el hielo en diferentes coordenadas del suroeste del Mar Blanco. Con temperaturas que rondaban los -20ºC, durante 10 días se sumergió y exploró a diario un entorno sorprendentemente colorido bajo el hielo, adquiriendo y perfeccionando a la vez útiles técnicas y conocimientos sobre los entornos Árticos y el buceo extremo bajo el hielo con un solo orificio de entrada y salida